La Porción de esta semana lleva por título BeHar - BeJhuqotay y puede ser traducido al castellano como En el Monte – En Mis Estatutos, está basada en VaYiqra’ 25:1-27:34; Haftarah Yermiyahu 17:1-14.
Primera Lectura 25:1-18. Esta porción es sumamente interesante, pues en ella se indican la Shemitah: reposo para la tierra cada siete años; y el año del Jubileo, cada cincuenta años para liberación y restitución.
Segunda Lectura 25:19-28. El deber de los Bené Isra’el de ayudar a sus hermanos para que no caigan en la pobreza extrema. El Go’el es el familiar cercano que tiene la responsabilidad de rescatar al pariente que haya tenido que venderse como siervo.
Tercera Lectura 25:29-38. El mandamiento de evitar con Bené Isra’el llegue a convertirse en un siervo o indigente, es porque ellos habían sido esclavizados en Egipto.
Cuarta Lectura 25:39-26:9. Quien haya comprado un ser humano para ser siervo o esclavo, debía saber que en el año del jubileo tenía que dejarlo libre.
Quinta Lectura 26:10-46. Esta larga porción es lo contrario de lo anterior, el Eterno enumera a Su pueblo lo que les sucedería en caso de no obedecer. La historia se ha encargado de confirmar esa terrible verdad.
Sexta Lectura 27:1-15. Aquí tenemos las instrucciones para cuando se hace voto o promesa al Eterno; pero ha de recordarse que mientras no haya Bet haMiqdash ni Kohén en ejercicio. No se hacen votos.
Séptima Lectura 27:16-30. De todas maneras hay que saber que cuando se hace un voto o promesa al Eterno debe cumplirse; no se varían las condiciones.
Última Lectura 27:31-34. Todo lo consagrado al Eterno, pertenece al Eterno.
Profetas Jeremías 17:1-14. Dos pensamientos destacan aquí: “Maldito el varón que confía en el hombre” y “Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?
Saludos y felicidades a las madres en su día.
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